¿Qué es Kubernetes y por qué tantas empresas hablan de él?

junio 18, 2025 Copy link

Si trabajas cerca del mundo tech, es probable que hayas escuchado este nombre más de una vez: Kubernetes. Para muchos suena complejo, técnico o incluso lejano, pero la realidad es que está detrás de muchísimas aplicaciones y servicios que usamos todos los días: desde plataformas de streaming hasta servicios bancarios, apps de delivery o herramientas de trabajo remoto.

Y aunque no estés en un rol técnico, entender qué es Kubernetes puede ayudarte a tener una visión más completa de cómo se construyen y escalan las soluciones digitales hoy en día. Porque este tipo de tecnología no es exclusiva de quienes programan. Su impacto toca áreas como producto, marketing, diseño, atención al cliente y cualquier otro equipo que participe en la entrega de un servicio digital.

Kubernetes se ha convertido en una pieza clave para muchas empresas que necesitan que sus aplicaciones sean rápidas, seguras y capaces de crecer sin fallar. Pero, ¿por qué es tan popular? ¿Cómo funciona exactamente? ¿Y qué lo hace tan útil?

En este artículo te lo explicamos en palabras sencillas, sin necesidad de saber programar. Porque, así como no necesitas ser mecánico para entender cómo funciona un carro, tampoco necesitas ser ingeniero para comprender por qué Kubernetes es importante en el mundo digital actual.

Pero… ¿Qué es exactamente Kubernetes?

Kubernetes (o “K8s”, como lo llaman quienes ya le tienen confianza) es una plataforma que automatiza la forma en que se ejecutan y gestionan las aplicaciones, especialmente cuando están construidas usando contenedores.

¿Contenedores? No te preocupes, lo explicamos fácil: imagina que una aplicación se divide en partes pequeñas, como si cada función o servicio viviera dentro de su propia cajita (eso sería un contenedor). Estas cajitas se pueden mover, actualizar o reemplazar sin afectar al resto. Así, todo es más flexible, más rápido y más fácil de mantener.

Ahora bien, cuando una empresa tiene decenas, cientos o miles de estos contenedores funcionando al mismo tiempo, necesitan una forma de organizarlos sin volverse locos. Ahí es donde entra Kubernetes.

Piénsalo como el director de una orquesta. No toca los instrumentos, pero se asegura de que todo suene bien: que cada músico entre cuando debe, que el ritmo se mantenga y que, si un instrumento falla, haya otro que tome su lugar sin que el concierto se detenga. Kubernetes hace exactamente eso, pero con las partes de una aplicación.

Se encarga de coordinar, escalar, monitorear y reparar automáticamente todo lo necesario para que una aplicación funcione de forma fluida y confiable, sin importar si está alojada en servidores propios, en la nube o en una combinación de ambos.

¿Por qué surgió Kubernetes?

Antes de que todo fuera tan automatizado como hoy, lanzar una aplicación o servicio digital requería instalar todo manualmente en uno o varios servidores físicos. Era un proceso lento, costoso y propenso a errores. Si algo fallaba, había que intervenir a mano. Y si el número de usuarios crecía de golpe, escalar el sistema era todo un dolor de cabeza.

Luego llegaron los contenedores, una forma de empaquetar aplicaciones con todo lo que necesitan para funcionar, sin importar dónde se ejecuten. Gracias a ellos, las aplicaciones se volvieron más portables, rápidas de desplegar y fáciles de actualizar.

Pero esa solución trajo un nuevo desafío: si ahora puedes tener cientos o miles de contenedores ejecutándose al mismo tiempo, ¿cómo los organizas? ¿Cómo te aseguras de que todo funcione sin tener que estar vigilando cada contenedor uno por uno?

Ahí es donde entra Kubernetes.

Kubernetes fue creado por Google, aprovechando su experiencia gestionando aplicaciones a gran escala. Hoy en día es un proyecto de código abierto liderado por la Cloud Native Computing Foundation, y se ha convertido en el estándar para la orquestación de contenedores. En “From Google to the world: The Kubernetes origin story” por Craig McLuckie (co‑fundador) explica cómo en 2013 nació la idea de crear una herramienta abierta basada en Borg, el sistema interno de Google para gestionar contenedores.

¿Qué cosas puede hacer Kubernetes?

Sin necesidad de entrar en detalles técnicos, lo que hace que Kubernetes sea tan poderoso es su capacidad para encargarse de muchas tareas que, de otra manera, consumirían tiempo, esfuerzo y serían propensas a errores si se hicieran manualmente.

Estas son algunas de las cosas que Kubernetes puede hacer por ti (y por tu equipo):

  • Detectar fallos y corregirlos automáticamente. Si una parte de la aplicación deja de funcionar, Kubernetes se da cuenta y la reemplaza por otra sin que nadie tenga que intervenir. 
  • Distribuir la carga de trabajo. Si tienes muchos usuarios accediendo a tu app, Kubernetes reparte el trabajo entre distintos servidores para que ninguno colapse. 
  • Actualizar sin interrumpir. Puedes lanzar una nueva versión de tu app sin desconectar a los usuarios. Kubernetes se encarga de que la transición sea suave. 
  • Escalar automáticamente. Si de repente más personas empiezan a usar tu app, Kubernetes puede crear más “copias” de la aplicación para responder a esa demanda… y reducirlas cuando ya no sean necesarias. 
  • Automatizar tareas repetitivas. Cosas que antes hacían los equipos técnicos a mano, como reiniciar procesos, hacer despliegues o gestionar el estado de los sistemas, ahora se pueden automatizar de forma confiable.

Kubernetes es como un asistente invisible que trabaja 24/7 para que las aplicaciones estén siempre disponibles, actualizadas y funcionando bien… sin importar cuán grandes o complejas sean.

¿Y todo esto cómo impacta a una empresa?

Aunque Kubernetes pueda sonar como algo muy técnico o exclusivo del área de infraestructura, su impacto se siente en toda la empresa. Desde el equipo de producto hasta quienes están en contacto con los clientes.

Implementarlo no se trata solo de mejorar cómo funciona la tecnología, sino de impulsar cómo una empresa entrega valor. ¿Cómo? Aquí algunos ejemplos:

  • Actualizaciones más frecuentes y seguras. Se pueden lanzar nuevas funcionalidades o mejoras sin temor a “romper” lo que ya funciona. Esto permite responder rápido a las necesidades del mercado.

  • Mayor disponibilidad. Con Kubernetes, los servicios están menos expuestos a caídas o interrupciones. Eso significa menos tiempo fuera de línea y una mejor experiencia para el usuario.

  • Uso eficiente de recursos. La plataforma optimiza cómo se utilizan los servidores y recursos tecnológicos, lo que puede traducirse en ahorro de costos a mediano y largo plazo.

  • Escalabilidad sencilla. Cuando la demanda crece, permite escalar sin necesidad de rediseñar toda la infraestructura desde cero.

Es decir que Kubernetes ayuda a que las ideas lleguen más rápido al usuario, que la operación sea más estable, y que la tecnología esté siempre lista para acompañar el crecimiento, no para frenarlo. Un informe de VMware señala que 91 % de los encuestados ve beneficios en toda la empresa (más allá de TI), con mejoras en productividad (60 %) y eficiencia operativa (98 %). 

 

No necesitas ser técnico para entender su valor

Aunque es una herramienta usada por perfiles técnicos, su impacto se siente en toda la empresa. Desde producto hasta ventas, desde atención al cliente hasta marketing: saber que hay una infraestructura confiable, ágil y resiliente permite planear mejor y responder más rápido a lo que el cliente necesita.

  • Kubernetes es una plataforma para administrar aplicaciones modernas.

  • Se encarga de que todo funcione bien, incluso cuando hay cambios o errores.

  • Ayuda a escalar y mantener servicios digitales sin complicaciones.

  • Es una base clave para muchas empresas que quieren ser más ágiles y resilientes.

¿Quieres saber cómo Kubernetes puede ayudar a tu empresa a ser más eficiente, flexible y competitiva? Agenda una asesoría con nuestro equipo y conoce cómo hemos transformado infraestructuras y procesos en otras empresas de manera exitosa con la implementación de Kubernetes. Y si quieres seguir aprendiendo, en el próximo blog te contaremos cómo está compuesto Kubernetes por dentro y por qué cada una de sus partes cumple un rol clave en este sistema.