
Gestionar más de 150 bases de datos en Kubernetes puede parecer un desafío. En CCSolutions.io, lo abordamos como parte natural de nuestra evolución tecnológica, impulsada por la necesidad de escalar operaciones sin perder visibilidad, control ni rendimiento. Esta prioridad técnica no surgió de un momento a otro: fue el resultado de proyectos cada vez más complejos, entornos productivos en constante crecimiento y la responsabilidad de mantener la disponibilidad y el desempeño de servicios críticos.
Enfrentamos retos comunes para cualquier equipo que busca consolidar cargas de trabajo sensibles, como las bases de datos, en Kubernetes gestionado: automatización de despliegues, monitoreo granular, políticas de backup robustas, estrategias de alta disponibilidad, y sobre todo, consistencia en la operación diaria. Nuestra experiencia nos enseñó que no se trata solo de mover bases de datos al clúster, sino de repensar la arquitectura, los flujos de trabajo y las dependencias entre servicios.
El éxito en esta gestión se basó en tres pilares: observabilidad profunda, automatización efectiva y selección estratégica de herramientas. Implementamos soluciones como CloudNativePG para PostgreSQL, combinadas con operadores personalizados, mecanismos de autoescalado y monitoreo en tiempo real. Estas decisiones nos permitieron responder rápidamente ante cambios de carga, gestionar réplicas con confianza y mantener los entornos productivos sin degradación, incluso bajo presión.
Más allá de la tecnología, este proceso implicó un cambio cultural en los equipos: desde la forma en que definimos los pipelines de CI/CD hasta cómo gestionamos los backups y restauraciones automatizadas. Con más de 150 bases de datos activas, cada decisión cuenta, y la disciplina operativa se convierte en una ventaja estratégica. Hoy podemos decir que no sólo administramos volumen, sino que lo hacemos con visión, resiliencia y eficiencia.
Una necesidad real de escalabilidad sin complejidad
El crecimiento natural de nuestros entornos y proyectos trajo consigo un aumento significativo en la cantidad y relevancia operativa de las bases de datos. Desde el minuto uno, adoptamos Kubernetes no solo por su enfoque moderno y arquitectura escalable, sino porque su naturaleza open source nos permitió construir una plataforma flexible, adaptable y alineada con nuestros principios técnicos. Esta decisión marcó un antes y un después en nuestra velocidad de desarrollo y en la forma en que abordamos la gestión de infraestructura. En ese escenario, las prácticas tradicionales, basadas en scripts manuales, monitoreo aislado o configuraciones personalizadas, rápidamente dejaron de ser sostenibles. La necesidad era clara: escalar nuestras bases de datos sin añadir complejidad operativa ni comprometer la estabilidad.
Kubernetes nos ofreció un enfoque robusto para abordar ese desafío. La arquitectura declarativa de este sistema de orquestación fue clave para estandarizar y automatizar la gestión, pero sabíamos que no era suficiente por sí sola. Los requerimientos de alta disponibilidad, recuperación ante fallos, backups consistentes y réplicas en tiempo real exigían una solución más especializada. Tal como señala Ostride Labs en este artículo, si bien Kubernetes proporciona una plataforma sólida para escalar bases de datos de forma flexible y eficiente, es imprescindible complementar con herramientas avanzadas y buenas prácticas operativas para obtener resultados sostenibles a gran escala.
El verdadero punto de inflexión llegó con la adopción de operadores específicos para bases de datos. En particular, CloudNativePG, un operador open source certificado por la CNCF (Cloud Native Computing Foundation), nos permitió gestionar clústeres de PostgreSQL directamente sobre Kubernetes, respetando sus principios y sacando provecho de su ecosistema. Esta herramienta no solo nos ofreció compatibilidad con prácticas modernas, sino que simplificó tareas críticas como la gestión de réplicas síncronas, las actualizaciones controladas y la restauración ante fallos.
Al incorporar CloudNativePG en nuestra arquitectura, logramos una mayor coherencia entre entornos, reducción de errores manuales y una base sólida para escalar sin perder el control. Esto nos permitió centrarnos en la entrega de valor y confiabilidad, más que en la resolución de problemas operativos recurrentes.
Organización y visibilidad: claves en la operación diaria
Uno de los desafíos más importantes al administrar más de 150 bases de datos en entornos dinámicos fue mantener una visibilidad completa sin comprometer la eficiencia del monitoreo ni sobrecargar los equipos con alertas innecesarias. Desde CCSolutions.io entendimos que la clave no era solo recopilar datos, sino organizarlos de forma que facilitaran decisiones ágiles y precisas.
Adoptamos un stack de observabilidad basado en Prometheus y Grafana, complementado con herramientas personalizadas diseñadas para seguir el estado de cada instancia de base de datos en tiempo real. Este enfoque nos permitió identificar cuellos de botella, patrones de comportamiento anómalos y degradaciones de rendimiento antes de que impactaran en la operación. La incorporación de alertas inteligentes —basadas en umbrales dinámicos ajustados por contexto y carga— fue fundamental para reducir el ruido operacional y mejorar los tiempos de respuesta ante incidentes.
La organización estructural también jugó un papel clave. Agrupamos los clústeres de Kubernetes por entorno (producción, desarrollo, pruebas) y por tipo de carga de trabajo, lo que nos dio la posibilidad de escalar de manera modular y con un mayor nivel de aislamiento y control. Esta segmentación no solo facilitó la trazabilidad y el cumplimiento de buenas prácticas, también simplificó tareas como la gestión de permisos, actualizaciones y políticas de backup.
Actualmente, gestionamos más de 250 clústeres de Kubernetes distribuidos entre distintos entornos y clientes. Este enfoque nos permite mantener una operación organizada, predecible y con una capacidad real de escalar sin perder visibilidad ni control operativo.
Automatización que libera tiempo y recursos
Desde que adoptamos Kubernetes como base para modernizar nuestra infraestructura, uno de los principales objetivos fue estandarizar procesos y eliminar las limitaciones de la gestión manual. La operación de bases de datos a gran escala, especialmente en entornos de alta demanda, no solo es insostenible sin automatización, también se vuelve vulnerable a errores, inconsistencias y puntos críticos de rendimiento. En CCSolutions.io, enfrentamos este reto diseñando una estrategia automatizada integral que cubre desde la provisión hasta la recuperación ante fallos.
Implementamos pipelines de CI/CD que automatizan el despliegue de bases de datos, validan configuraciones y ejecutan pruebas de rendimiento antes de que cualquier instancia llegue a producción. Esta integración nos permitió asegurar estándares homogéneos en cada nuevo entorno y anticipar errores que antes solo se detectaban en operación. Con GitOps como metodología central, logramos control total, trazabilidad y reversibilidad en cada cambio aplicado, alineando al equipo de infraestructura y desarrollo bajo un mismo flujo operativo.
En paralelo, desarrollamos un sistema de backups automatizados y restauraciones bajo demanda, gestionados por código y versionados como parte del repositorio de infraestructura cloud-native sobre Kubernetes. Esta capacidad, sumada a políticas de failover automático y replicación síncrona con CloudNativePG, garantizó una continuidad operativa robusta y tiempos de recuperación controlados, incluso frente a incidentes críticos.
Más allá de facilitar la operación técnica, ésta automatización nos permitió liberar recursos del equipo, que hoy se enfoca en iniciativas de optimización, innovación y mejora continua. Así, escalar dejó de ser un desafío técnico para convertirse en una ventaja operativa que también impulsa el crecimiento de nuestra empresa.
Optimización de recursos y reducción de costos
En CCSolutions.io, aprendimos que escalar no se trata solo de rendimiento, sino también de eficiencia en el uso de los recursos. Al gestionar más de 150 bases de datos activas en Kubernetes, uno de nuestros objetivos principales fue eliminar el exceso de capacidad sin poner en riesgo la estabilidad. Para lograrlo, implementamos políticas del Vertical Pod Autoscaler (VPA), ajustamos finamente los requests y limits de CPU y memoria, y seleccionamos nodos optimizados específicamente para cargas de trabajo con alta demanda de almacenamiento y operaciones I/O.
En CCSolutions.io, aprendimos que escalar no se trata solo de rendimiento, sino también de eficiencia en el uso de los recursos. Al gestionar más de 150 bases de datos activas en Kubernetes, uno de nuestros objetivos principales fue eliminar el exceso de capacidad sin poner en riesgo la estabilidad. Para lograrlo, implementamos políticas del Vertical Pod Autoscaler (VPA), ajustamos finamente los requests y limits de CPU y memoria, y seleccionamos nodos optimizados específicamente para cargas de trabajo con alta demanda de almacenamiento y operaciones I/O.
Este setup, partiendo de una instancia RDS para tres bases de datos, tendría un costo de 29.597,47 USD, sin soporte dedicado 24/7. Sin embargo, desde CCSolutions.io hemos optimizado el clúster para correr estas 150 bases de datos por solo 5.000 USD, lo que incluye no solo las bases de datos, sino también las aplicaciones y herramientas necesarias para el equipo de desarrollo. En comparación, el costo en Azure sería de aproximadamente 22.689,74 USD, lo que resalta cómo optimizamos significativamente los recursos y costos sin comprometer la estabilidad y la eficiencia operativa, logrando así una infraestructura más económica, escalable y robusta.
Esta optimización no fue un proceso genérico, sino una tarea basada en el análisis detallado de patrones de consumo. Identificamos comportamientos por tipo de entorno (producción, desarrollo, testing) y diseñamos configuraciones personalizadas según la naturaleza de cada base de datos: desde instancias críticas con alta concurrencia hasta entornos temporales de pruebas que podían operar con recursos mínimos. Esta segmentación nos permitió aplicar escalamiento vertical y horizontal donde realmente aportaba valor, sin desperdiciar capacidad en cargas subutilizadas.
El resultado fue contundente: en ciertos entornos, logramos una reducción de hasta el 60% en los costos operativos relacionados con infraestructura basada en Kubernetes, sin comprometer la disponibilidad ni el rendimiento. Más allá del ahorro económico, ésta eficiencia nos dio flexibilidad para redirigir recursos hacia la innovación y la mejora continua del servicio, manteniendo la calidad operativa como una constante. La clave fue alinear decisiones técnicas con métricas claras y objetivos concretos de sostenibilidad.
¿Y qué pasa con la seguridad y la resiliencia?
En CCSolutions.io, la seguridad nunca fue un añadido: es parte del diseño desde el primer despliegue. Cada base de datos opera dentro de namespaces aislados, con roles y políticas RBAC definidos según el entorno y la relevancia operativa de la carga. Para la gestión segura de credenciales y datos sensibles, integramos HashiCorp Vault, lo que nos permite manejar credenciales de forma dinámica, con rotación automática y cifrado en tránsito y en reposo. Los backups, por su parte, son cifrados utilizando claves gestionadas y almacenados en buckets privados con políticas estrictas de acceso y retención, alineadas con requisitos de compliance y auditoría.
En cuanto a la resiliencia, nuestro enfoque combina automatización y validación constante. Implementamos mecanismos de failover automático a través de CloudNativePG, lo que garantiza la disponibilidad incluso ante fallas inesperadas. Pero no nos quedamos ahí: realizamos simulacros de recuperación ante desastres (DR) en entornos aislados y controlados, replicando fallos críticos para validar que las réplicas y backups pueden restaurarse sin pérdida de datos ni interrupciones prolongadas. Esta práctica nos da confianza no solo en la tecnología, sino en los procesos que la sostienen.
De la experiencia real a la estrategia
Gestionar más de 150 bases de datos en Kubernetes no solo requiere capacidad técnica, sino experiencia acumulada y una visión clara de hacia dónde debe evolucionar la infraestructura tecnológica. En CCSolutions.io, no seguimos tendencias: las validamos en producción, a escala, y con impacto real en eficiencia operativa.
Este enfoque es el que compartiremos en nuestro próximo webinar:
Bases de datos en Kubernetes: ¿Jugando con fuego o el futuro estratégico de la nube?
🗓 24 de abril · 🕚 11:00 a.m. (COL)
Una sesión donde hablaremos desde nuestra experiencia gestionando más de 150 bases de datos en Kubernetes: decisiones reales, resultados concretos y las prácticas que nos permiten lograr entornos estables, escalables y optimizados desde el primer clúster.